El Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional entiende que los hechos ocurridos el año pasado en el Camp Nou durante la final de la Copa del Rey, no son constitutivos de los delitos de injurias contra el titular de la Corona ni de ultrajes a los símbolos o emblemas de España sino que los mismos son equiparables a los que tuvieron lugar en mayo de 2009 en el estadio de fútbol Mestalla y que, según dictamen de Ministerio Fiscal, se consideraron manifestaciones críticas de carácter deportivo y político amparadas por el derecho a la libertad de expresión.